domingo, 23 de marzo de 2008

Crónica de una semana de vacaciones en Manzanillo, Colima.

Lunes.
El día comenzó temprano, no había dormido, se la pasó toda la noche jugando con sus amigos, si no era el "Guitar Hero", era el "Smash Bros. Brawl", incluso cuando los demás se fueron a dormir, él y otro de sus amigo se quedaron jugando hasta el amanecer. Ya de día, llamó su mamá para preguntar si estaba de acuerdo para salir esa misma noche o si prefería el día siguiente, él dijo que ese mismo día estaba bien, y minutos después ella volvió a marcar para confirmarle la hora de salida, 8:00pm. Desayunó con sus amigos lo que quedaba de pizza de la noche anterior, después se quedaron platicando otro rato. Al medio día estaban partiendo de regreso a sus respectivas casas, pero antes de eso le tocó conocer un lado de uno de sus amigos que no había visto antes, siempre lo había considerado frio, duro ante ciertas situaciones, siempre le había sorprendido olo seco que a veces se mostraba con su novia, pero lo que le sorpendía aún más era que ella siguiera con él; justo antes de irse, él comenzó a platicar sobre sus trenes, les mostró la colección de trenes que tenía, y cuando hablaba de ellos se podía percibir cierta ternura en sus palabras, algo que le resultó realmente facinante...
De regreso a casa, se despidió de sus amigos. Llegó a su departamento, se bañó, preparó su maleta para el viaje, y procuró dejarle comida suficiente a los gatos, de todas maneras su padre pasaría en la semana para checar a las mascotas. Consideró llevarse la computadora, pero al final decidió que no. Salió de su casa y se dirigió al metro, allí le ocurrió algo inesperado, se encontró con la chica metalera, la chica con el nombre que a todo poeta le evoca cierta melancolía, la chica que la semana anterior había invitado a salir y dijo que si, pero no habían quedado cuando. Hermosa como siempre, por un momento tuvo la impresión que iría con ella todo el camino cuando le pregonto a donde se dirigía, así que no pudo evitar desilusionarse cuando ella de bajó en la siguiente estación para ir por otra ruta, pero no importba, justamente les acababa de platicar de ella a sus amigos en la mañana, y el encontrarsela de esa forma, siendo ella la última persona que vería antes de partir en su viaje, debía esconder un significado especial, o al menos eso quería creer...
Llegó a casa de su mamá, comieron, puso uno de los videos de "Les Luthiers" que le habían regresado ese mismo día, y después de confirmar que su hermano no llegaría a tiempo para dejarlos en la terminal de autobuses, salieron para tomar un taxi. El trayecto fue corto, llegaron media hora antes de lo esperado. Finalmente abordaron el camión el cual era bastante amplio y con asientos al estilo de primera clase en un avión, así que en cuanto tomo asiento y se acomodó, se quedó dormido...

Martes.
Cuando llegaron a la terminal de Manzanillo, apenas estaba amaneciendo, eran casi las 7 de la mañana. Tomaron un taxi y fueron a casa de los parientes con los que pasarían la semana, primos de su madre, pero casi totales desconocidos para él.La última vez que estubo alli tenía mas de 7 años, lo único que podía recordar de esa ocasión era el huachinango al mojo de ajo que su tío, que era chef, les había preparado. Sin embargo, la cálida bienvenida no faltó, prácticamente con el desayuno en la mesa. Las horas de la mañana pasaron rápidamente con las platicas sobre la familia, poniendose al corriente de las noticias mas relevantes ocurridas en los últimos días. Después los dejaron descansar un rato del viaje. Luego de una larga siesta, se lavantó y se baño, cuando salió ya era hora de la comida, y allí ahora estaba la prima que estaba tomando su hora de comida. Su recuerdo de ella era vago. Luego de la comida, la prima regresó al trabajo, él y su mamá se quedaron platicando con los tíos un rato más, luego llegó otro tío, a ese de plano no lo ubicaba. Como todos los hombres en esa familia, chef tambien, y en su hora de descanso. Estuvieron platicando un rato más cuando llegó uno de sus primos, quien al igual que el tío había creído que era la pareja de su madre. Luego de aclarar las cosas y platicar otro poco, el tío que había llegado de visita se retiró ofreciendoles un aventón al centro de la ciudad, plan que había salido a la luz durante la platica. Así pues, él y su mamá fueron al malecón del puerto donde pasearon un rato para conocer, aunque no había mucho que recorrer. Tomaron algunas fotos y luego caminaron un rato por la costa. En el trayecto, tuvieron la oportunidad de ver un crusero partir del puerto, una vista realmente impresionante pues la nave era un hotel flotante, vieron como poco a poco se alejaba del puerto mientras viraba en el mar para perderse en el océano, entonces se esuchó el pitido del silbato, pero no era del crusero sino del tren que venía llegando. La impresionante locomora pasó jalando mas de 100 vagones de carga del tamaño de un remolque de trailer, algunos inlcluso dobles. Durante casi media hora el tren detuvo el tránsito. Mientras veía pasar el tren, no pudo evitar acordarse de su amigo al que le gustan los trenes...
Una vez de regreso a casa de los tíos, la cena los estaba esperando, y después volvieron las conversaciones sobre diferentes cosas hasta que se fueron a dormir....

Miércoles.
Despertó algo tarde, cuando bajó a desayunar,su prima ya se había ido a trabajar. Después de desayunar y conversar otro rato, salieron para ir a visitar la capital del estado, así que tomaron un taxi rumbo a la terminal de autobuses y se dirijieron a Colima. El trayecto duró mas de lo esperado, sin embargo, tuvieron para visitar la plaza principal en el centro de la ciudad. Consiguieron un folleto de información turística y visitaron algunos de los lugares mas llamativos, uno ellos un hermoso jardín con una fuente en el centro lleno de colores por las diferentes flores que allí se cuidaban. Caminaron a otro parque donde había una piedra con cierta fama, aunque una vez alli no había nada en especial. Ya se aproximaba la hora de la comida así que decidieron ir al mercado indicado en el folleto turístico, pero habrá sido la temporada o la hora, casi no había gente. Aún así decidieron comer menudo en una de las fondas que se encontraban, pero al final quedaron decepcionados con la comida pues no estubo tan buena. Caminaron otro poco mas por el centro de la ciudad, luego comieron un helado y se sentaron para disfrutarlo en frente del kiosco de la plaza principal, desafortnadamente los helados tampoco estuvieron buenos. Regresaron a la terminal de autobuses y de allí regresaron a Manzanillo. Como era un temprano, decidieron pasar a la plaza comercial para pasear un rato y ver si había algo que valiera la pena comprar, estubo tentado de revisar un café internet, pero no le vio sentido. Después regresaron con sus anfitriones, quienes ya tenían la cena preparada, pero en esa ocasión estaba el mayor de sus primos con su esposa y sus hijos, tampoco tenía un claro recuerdo de ellos, y estaba seguro que era la primera vez que conocía a los niños, sus sobrinos. Allí estuvieron un rato, cenando y platicando, hasta que se fue el primo con su familia, y despues de otro rato más, se fueron a dormir...

Jueves.
Dado que llevaban 2 días en la costa sin haber visitado el mar, habían decidido que irian a la playa ese día, así que se levantaron temprano. El novio de la prima les hizo el favor de llevarlos hasta la playa donde pasaron toda la mañana. Mientras su mamá y su prima platicaban, él decidió meterse al mar, aunque estaba lleno de piedras, y no quería lastimarse el pie mas de lo que ya lo tenía, así que busco un mejor lugar donde nadar. Estubo un rato disfrutando de las olas del mar, viendo las hermosas chicas en bikini (aunque en realidad no había tantas), incluso tuvo la oportunidad de ver una pequeña medusa de las que llaman "agua mala", aunque sabía que no debía tocarla. Luego de un rato salió del mar, regresó donde su madre y su prima. Se sentó un rato, asoleandose bajo la sombra de una palapa hasta que se quedó  dormido un rato. Luego se dispuso a leer el libro que le habían dejado en su taller de literatura, pero justo entonces llamó el novio de la prima para a visar que ya iba por ellos, así que regresaron a donde los tíos. Cuando llegaron, allí estaba su otro tío con sus hijas, las otras primas, a ellas no las conocía en absoluto, y se quedó un poco decepcionado cuando vio que ellas cubrian los estándares de las mujeres de esa familia. Comieron ceviche, preparado por mi tío el chef que ahora pasaba sus días jubilado. Después de eso, el otro tío los invito a pasear por los lugares menos aledaños de Manzanillo, y despues los llevó a un bonito mirador y a un hotel-restaurante con playa privada y vista magnífica. Luego de eso regresaron a casa de los tíos anfitriones, las mujeres se fueron a misa y el se quedó para terminar de leer el libro que había comenzado en la mañana. Cuando regresó su mamá, se fueron a dormir...

Viernes.
El día parecía prometedor, ya antes les habían dicho que su primo pasaría por ellos para llevarlos a visitar el hotel en el que trabajaban, pero antes de eso fueron al malecón de la ciudad donde se encontraron con un paseo turístico que no podrían tomar ese día, tambien le tocó ver a chicas promocionando cerveza en paños menores y después compraron un helado. Se sentaron a disfrutarlo cuando llegó una estudiantina que estuvo tocando por un rato. Le fue imposible no recordar esos días en los que él tambien tocó en la estudiantina de la prepa... Finalmente decidieron regresar con los anfitriones, tomaron la misma ruta que la vez pasada aunque en esta ocasión no hubo cruceron ni tren, sólo una chica que andaba con su guitarra un lugar donde poder acomodarse para tomar la mejor inspiración del mar. De regreso a la casa de los tíos, la comida los esperaba, como de costumbre, rica y abundante, al punto de hacerlo sentir a uno culpable por comer tanto. Finalmente el primo llegó por ellos para llevarlos al hotel.
En un principio, penso que tal vez irían de parranda a un antro, pero al final sólo los llevaría a conocer el hotel, cosa que nunca le había sucedido antes. Llegando a barra de navidad, resulta que había que tomar una lancha para llegar al hotel, aunque sólo como una opcion pues tambien había entrada por tierra. Realmente no le encontraba sentido al visitar un hotel en el que no se quedarían, pero luego de pasear por algunas de las zonas del hotel, reconoció lo impresionante de este, fuera del diseño arquitectonico, cada pequeño detalle hacía del hotel un lugar donde uno querría pasar las vacaciones siempre. Se encontraron con el otro primo, y los llevó a la suite precidencial, una habitación en la que tal vez jamas se hospedaría en toda su vida. Después de eso los llevaron a invitar al restaurante con la vista mas agradable del hote, en una terraza, con vista al puerto donde la luz de la luna llena iluminaba el mar de una forma hipnótica. La comida, como era de esperarse, fabulosa, aunque el caracter culinario de los primos chef no puedo evitar salir a la luz con comentarios de desaprobacion de algunos alimentos, y no era de menos, ellos lo supervisaban. Al final, el otro primos, el casado, los llevo de vuelta con los tíos...

Sabado.
En el último día ya no hizo nada. Despues de desayunar regresó a dormir de nuevo, luego bajo a comer, pero en esa ocacsión el tío no estaba porque se sentía mal. Al final, la prima y su novio los llevaron a la terminal de autobuses, la semana se acabó, con ella, las vacaciones, ahora sólo queda regresar a la vida real...

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